martes, 17 de diciembre de 2019

"La Civilización Céltica" por Alain de Benoist.

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 Este librillo muestra un interesantísimo ensayo escrito por el filósofo francés Alain de Benoist, quien infelizmente es pagano y tiene muy erróneos puntos de vista acerca de lo que es realmente el cristianismo, ya que según él, el cristianismo es una especie de “proto-comunismo”, cuando tal afirmación está muy alejada de la realidad; sin embargo, Alain de Benoist acierta de forma excelente y da muy buenos puntos de vista, acerca de los orígenes y desarrollo de la civilización céltica y el mismísimo Imperio Céltico, de tiempos míticos y antiguos, que fue el predecesor del actual Soberano Imperio Romano Oriental y Apostólico de la Confederación de Estados Libres Teocráticos Independientes y Colonizados de la Gran Gonellasia, más conocido como Imperio Céltico-Gonelliense, Imperio Céltico, Estado Imperial de CELTIC, o simplemente, CELTIC.
Muchas personas se empantanan creyendo que CELTIC es una mera micronación simulacionista o hobby sin sentido, desconociendo la profundidad histórica del renacimiento céltico. El Estado Imperial Céltico actual, es una micronación inspirada no sólo en el Sacro Imperio Romano Germánico, sino también en la Monarquía Hispánica Universal (vulgarmente conocida como “Imperio Español”), y en el antiquísimo Imperio Céltico original, de épocas anteriores a Nuestro Señor Jesucristo.
Dicho Imperio, fue el origen más antiguo del actual CELTIC, y además, el germen de toda la civilización europea, junto con la Antigua Grecia y la Antigua Roma; el origen de la Civilización Cristiana-Occidental-Aria. Todo comenzó con CELTIC y todo se purificará con CELTIC.
De hecho, el mal llamado “saludo romano”—actualmente usado en CELTIC—surgió en el antiguo Imperio Céltico, y los romanos, simplemente tomaron el saludo celtíbero, como propio, porque quedaron impresionados por la rectitud e imponencia de aquel saludo de paz y compañerismo entre guerreros. Actualmente, ese saludo “romano”—que es en realidad el saludo céltico—es usado con total propiedad por los ciudadanos célticos, puesto que CELTIC es una micronación que es una reconstrucción y restauración del antiguo Imperio Céltico; los célticos somos los verdaderos herederos culturales de ese antiquísimo Imperio, y por ende, reivindicamos ese saludo como propio, y afirmamos que somos quienes más podemos usarlo con propiedad: ¡ese saludo es nuestro, el saludo céltico! Y no es “saludo nazi”, como afirman los ignorantes de la Izquierda, ya que ese saludo fue usado por nuestros antepasados, muchísimos siglos antes, que los nacionalsocialistas alemanes se les ocurrieran plagiarnos. Además, ellos no lo usan del todo con propiedad, ya que son socialistas, y nuestros antepasados verdaderos, jamás consentirían el igualitarismo socialista, sino el capitalismo y la jerarquía; los fascistas auténticos en cambio, sí tienen derecho a usar ese saludo con propiedad, ya que son los herederos del Imperio Romano, el cual también los célticos defendemos, en su versión cristiana.
Por eso, aclaramos ad ovum, que discordamos con los desvíos anticristianos del señor Benoist; él se equivoca profundamente en su paganismo absurdo, ya que antepone el simbolismo pagano, antes que la fe verdadera, en el Dios Uno y Trino. De hecho, según él mismo explica, los célticos ya habían adelantado el monoteísmo, puesto que todavía tenían el recuerdo del Diluvio universal, y de la civilización antediluviana (la pangeana: atlántica, lemúrica, hiperbórea, etcétera). El Imperio Céltico, fue el origen más impresionante de las culturas europeas; ellos eran los pueblos protoindoeuropeos, que provinieron del este y llegaron a abarcar desde el Cáucaso hasta las islas Británicas, pasando por el centro de Europa, el norte de Francia y España. Los célticos, inventaron la cruz céltica, nuestra cruz, que es símbolo del cristianismo primitivo—por ejemplo, cuando San Patricio expulsó a los duendes malignos de Irlanda—y también de nuestra madre Europa, cristiana, blanca y pura.
La cruz céltica es el máximo símbolo que nos representa a los célticos; y el antiguo paganismo céltico, fue sustituida luego, por el cristianismo céltico, que es en realidad ni más ni menos, que el cristianismo primitivo u original. Cristo fundó la Iglesia Católica, la de los Apóstoles, la de los Padres, la nicena, la romana, la auténtica, la verdadera; y más allá de que a principios del siglo XX, el Vaticano terminó traicionando a la Iglesia de Cristo, nosotros los célticos, seguimos fielmente a la Iglesia Católica original y de siempre, sin dejarnos llevar por mentiras paganas judaizantes. El único paganismo respetable es únicamente aquel que es meramente simbólico, es decir, que sirve para representar a las fuerzas de la naturaleza, creada por Dios; o un cripto-paganismo que, además, está representado con la Virgen María y los santos y ángeles del cristianismo, y que nada que ver tiene con el paganismo progresista, sino que es una especie de “paganismo católico”, que se contrapone al protestantismo judaizante, el cual desprecia a la Virgen María y a los santos, burlándose de la Biblia, que es la Palabra de Dios.
Nosotros los católicos célticos, los verdaderos católicos, simplemente nos limitamos a seguir fielmente la Santa Biblia y la Santa Tradición (el Magisterio) de la Santa Madre Iglesia, desde el siglo I, hasta la actualidad. Nosotros no somos más que una continuidad histórica y coherente, desde el cristianismo del siglo I, hasta nuestros días; y a su vez, una continuidad, del paganismo solar proto-cristiano céltico y grecorromano, que se terminó convirtiendo en cristianismo primitivo. CELTIC es la coherencia máxima, plasmada en todos sus fundamentos; CELTIC comenzó hace miles de años, como veremos en este ensayo, y estará con el mundo hasta el fin de los tiempos.

Adolfo Etebaldo Vladímir Telivonov von Shubert, el Editor Encargado General.
Celtícpolis, martes 17 de diciembre de 2019 ADAT.